Republica de Malí un país de contrastes.

África un continente rico en cultura.

Quiero empezar por unas palabras dedicadas a todos los aventureros y viajeros, para poder viajar e integrarse en una sociedad distinta a la de uno, debemos respetar a la humanidad , con solo hacer esto tenemos ganado un 90 % de satisfacción y aceptación a donde quiera que vallamos. 

Uno de los viajes más maravillosos que he tenido fue en el año 2008, cuando decidí ir junto a dos personas que amo, mi padre y mi primo, a la República de Malí. Nunca imagine conocer gente tan amable y cordial como la gente oriunda de dicho país.

Desde que comenzó el viaje estuve interesado en un destino en especial el País Dogón, para mí un territorio predilecto, ya que estaba la mezcla perfecta para BeerMan, animismo más cerveza de mijo.

A lo largo de mi recorrido de oeste a este, fui recorriendo bares, probando todas la cervezas que me podría encontrar y lo más importante compartiendo con la gente e intentando integrarme a su estilo de vida. De estas personas conseguí historias y mitos muy interesantes que hacían mi estancia más cercana a lo que vivía y palpaba del día al día. 

Entre la magia, las energías, la cerveza y la sonrisa de la gente empezaba a impacientarme por llegar ya a la Falla de Beñangara, País Dogón,  una extensión de tierra donde lo irreal era posible. 

MI experiencia con la cerveza de mijo. 

Nunca olvidaré mi llegada a esta tierra, e7l gran País Dogon, todo aquello que había visto en documentales empezaba a convertirse en una realidad inmediata.  

Lo primero que hice fue ir a una casa de barro donde vivía la familia del brujo de la comarca,  que se preparaba para la fiesta del pueblo. Ellas estaban sacando las vasijas de cerveza, que llevaban más de cinco meses fermentándose. Nos dieron una cálida bienvenida, muy típico de los dogones, y nos ofrecieron un trago de esta cerveza, como también nos invitaron a la celebración que daba lugar el mismo día.  

Para esta población la cerveza de mijo tiene un significado antropológico y social, digo esto ya que dicha bebida la utilizan de dos maneras. La primera cumple con la función de agente socializador e integrador, se comparte con todo el pueblo como también con los invitados, bebiendo todos por igual del mismo cuenco, esto significa que somos todos hermanos, que no hay diferencias entre nosotros, se olvida la raza, el credo o la posición social.

El segundo significado tiene que ver con la parte metafísica y antropológica que esta etnia demostraba por medio de la cerveza. Así como en muchas partes del mundo ciertas sustancias se utilizan para conectarse con los ancestros, la cerveza de mijo también es el canal para poder recordar y conectarse con los chamanes o dioses animistas que viven en la pachamama o en el más allá. 

Esta cerveza no es solo una bebida, es más que eso, es parte de un sistema de vida que tiene su equilibrio cultural mediante agentes externos, es parte de un todo social. 

Dedicado a mi hermano Tapili, y al pueblo de Malí.