En los últimos años los gobiernos teocráticos
musulmanes han cerrado cervecerías alrededor de todo el mundo, pasando por
Pakistán, Sudán del Norte o republica Sudanesa, y llegando a la península pérsica,
Irán que desde que se estableció el mandato del ayatola se han cerrado más de
10 cervecerías, y ahora en la vista la fábrica Seera en el Yemen.
Según el gerente de la fábrica Eckhardt
Zitzmann, alemán de nacimiento, confirma que los empleados de su fábrica
empiezan a tener problemas dentro de la sociedad por la producción de alcohol.
Las mujeres de los hombres que trabajan e dentro de la cervecería tienen que
lavar la ropa por separado, algunas han sido apedreadas caminando por las
calles de Aden; por otro lado los hombres jóvenes se le dificulta conseguir
pareja o novia, ya que no son bien vistos por los ojos de la familia de las
mujeres, obligándolos a migrar a otros países musulmanes para poder conseguir
mujer.
Pero no todo es negativo al respecto de la
ingesta de cerveza en el sur del Yemen. Según lo que dice un yemení: "En
el (persa) del Golfo, el licor está prohibido, pero ir a las casas de la gente
allí y te encuentras bares completos", dijo un yemení. "Aquí no
somos hipócritas. Si quieres ir a un bar, se puede. Si quieres ir a una
mezquita, se puede."
Zitzmann asegura que Serra es la fuente
más grande de ingresos para la población, dice que para el turismo es esencial
que el consumo puede estar próximo al consumo que hay en muchos países de
Europa.
“Yemenitas beben principalmente por la
noche en bares pequeños lejos de las zonas residenciales.
En algunos barrios que compran cerveza de
pequeñas aberturas en las paredes a través del cual el vendedor apenas se puede
ver, a continuación, sentarse en el suelo en los círculos de amigos, lejos de
la mirada de desaprobación de sus esposas.”
“Yemeníes mastican qat, una hoja que contiene
un estimulante suave, mientras que el consumo de cerveza, lo que aumenta el
efecto. En el sur de Yemen se permite qat sólo en los días no laborales -
jueves y viernes.”
Los diplomáticos dicen que hay una presión
creciente, aunque indirecto, de Arabia Saudita y Yemen del Norte para cerrar la
fábrica de cerveza.
Zitzmann era una fábrica de cerveza en
Irán antes y después de la revolución islámica de 1979. Como otras
cervecerías cerradas, se pasó a la cerveza sin alcohol, luego llegó a Adén para
ayudar a poner en marcha la fábrica Seera en 1980.
Él dijo que la planta tiene previsto comenzar a
exportar su cerveza y se está preparando una versión sin alcohol también.
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